El Libro de Enoc (o Henoc) es un texto enigmático, apócrifo del Antiguo Testamento, muy conocido en el antiguo judaísmo y luego en el cristianismo, prontamente vuelto un libro "maldito". Enoc, bisnieto de Noe, es elevado por Dios y testigo de la "caída" de los ángeles rebeldes. Este es el conocido conflicto entre Dios y Satanás, cada uno con sus hordas de ángeles y demonios que pelearán entre si hasta ser el segundo derrotado. En el Apocalipsis (20; 1-3) Juan escribe: "Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en el mano. Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por mil años; y lo arrojó al abismo y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo"; finalmente Dios "lo juzgará y mediante el fuego lo consumirá". La obra relata la caída de los ángeles y la confrontación final. Se describen las diversas categorías y jerarquías de ángeles, arcángeles, querubines, ubicando el libro de Enoc, así como sus personajes, en el contexto entorno histórico arqueológico del Medio Oriente y su entorno geográfico inmediato.