El genio creador de Andy Riley ha encontrado un rico filón con su tipo de humor irreverente que no conoce fronteras y, al parecer, tampoco tiene límites. Después de mostrarnos que unos animalitos tan aparentemente inocentes como los conejos pueden tener un irresistible instinto suicida, lo egoístas que pueden ser los cerdos o lo locos que pueden llegar a ser algunos inventores, ahora nos descubre de qué manera una copa de vino puede aumentar la inteligencia de las madres. Andy Riley homenajea a las madres en 60 chistes rebosantes de afecto, ingenio y gracia, además de algunas observaciones irónicas que, sin duda, provocarán un gesto de aprobación y complicidad de las madres y que tendrán continuación en La cerveza hace más fuerte a papá. El autor británico lleva vendidos en España más de 40.000 ejemplares de los tres títulos de la exitosa saga de los conejitos suicidas."Si hubiera sabido que ser madre era tan divertido, me habría convertido en una de ellas". Sue Perkins