Cuatro jóvenes son llamados a filas. Hay una guerra y deben pasar un tiempo en un campo de entrenamiento. De ser unos simples números pasarán a ser reconocidos por un alias: el Bragas, el Orejas, el Despiadado, el Piruleta. Un quinto, Gris, ha elegido la deserción y encuentra refugio en la casa de una joven que participa activamente en la oposición a la guerra. El campo militar se convierte en un plano del mundo: vivir es sobrevivir entre la obediencia disciplinaria, el miedo y la llamada del deseo.