En una crítica de un libro anterior de Javier Castillo, le afeé que hubiera ubicado la trama (otra vez) en Estados Unidos y la falta de documentación sobre ese país, sus costumbres, etc., lo cual salpicaba la narración de bastantes incongruencias. Es innegable que en este libro la documentación es mejor y que todo parece medido y comprobado, pero da la sensación de que haya sido más importante eso que todo lo demás. Parece más dedicado a que todo sea fiel a los emplazamientos que a la trama en sí, que flojea y mucho. Me sigue chirriando la ambientación en Estados Unidos, cuando el libro está lleno de expresiones "castizas". Me gustaría ver algún libro en un entorno más conocido, seguro que suena mucho más natural (la adaptación de Netflix La chica de nieve sale mucho más airosa precisamente por eso). En cuanto al argumento de El juego del alma, aunque es algo más verosímil que libros anteriores, avanza muy lento, con tres personajes descubriendo prácticamente lo mismo cada uno por su lado, y resulta bastante previsible en su conjunto. Resumiendo, se me vuelve a quedar corto.
hace 1 semana