Víctor y Samuel, los hermanos Alvarado, nunca han tenido una relación cordial. Su propio padre, el rico empresario Ernesto Alvarado, hizo nacer entre ellos una profunda rivalidad que los enfrentaba por todo, desde el control de la poderosa empresa familiar a sus relaciones con las mujeres.
Las hermanas Ribas provienen de una familia desestructurada, y Silvia, la mayor, lucha por sobrevivir a las dificultades económicas y al egoísmo de su hermana Miriam, que vive sin trabajar, a costa del dinero que ella gana. Pero Silvia lleva meses sin encontrar un empleo, y solo la ayuda de su buena amiga Lara le permite seguir adelante. Es entonces cuando una carta del juzgado la coloca en una complicada situación: cambiará sus vidas: si no asume su deuda de alquiler, ambas deberán abandonar su vivienda. Silvia, desesperada, decide responder a un anuncio de Samuel Alvarado, que vive postrado en una silla de ruedas debido a una rara enfermedad, en el que se ofrece una enorme cantidad de dinero por un sorprendente trabajo.
¿Cómo pensar en los sentimientos cuando es la necesidad la que orienta nuestra vida? Pero el amor es como un cuadro enmarcado en nuestra existencia. Solo hay que mirar a lo lejos, hacia el mar.