«Yo celebro que Emma Bovary –ha escrito Vargas Llosa– en vez de sofocar sus sentidos tratara de colmarlos, que no tuviera escrúpulo en confundir el cul y el coeur, que, de hecho, son parientes cercanos, y que fuera capaz de creer que la luna existía para alumbrar su alcoba.» No han dejado de corr...