Desasosiego, sobrecogimiento; estas son algunas de las sensaciones que Hellville despierta inmediatamente en el lector, o, dado de que se trata de historietas mudas, más apropiado sería acaso decir en el observador. No es extraño si tenemos en cuenta que los sentimientos en sus personajes son igualmente oscuros. Hellville esta llena de secuencias de violenci, fantasías de corte surrealista, fenómenos dotados de un aire casi religioso. Desarrollado con una lógica interna inapelable que frecuentemente conducen a la ironía, nunca a la moraleja. Una ironía de la que se destilan ideas tan negras como cada una de las páginas del autor suizo.