Un libro sencillo para leer cada año y descubrir cosas nuevas entre sus páginas, acompañando al Principito en ese viaje físico e interno que hace. Es del tipo de narraciones que, por su alta carga moral, depende del momento en el que lo leas, puedes entenderlo de una u otra manera y sacar diferentes lecciones para la vida. Y para recordar, sobre todo, que "lo esencial es invisible a los ojos".
hace 3 años