- CRÍTICA PERSONAL: Honestamente, una novela poco atrayente (para mi gusto). Por la sinopsis leída al principio, pensé que me iba a gustar; pero no fue así. Me pareció una novela un poco confusa, con muchos saltos y historias dentro de historias. Desafortunadamente no me atrapó en ningún momento de la lectura; quería dejarla a mitad de camino, pero quise darle el voto de confianza a ver. Personalmente, no recomendaría esta novela. La única frase que rescato de la lectura, es (exactamente) la última línea del epílogo (en el cual la autora busca dar una pequeña justificación o contextualización teórica de su relato); dice: «... PORQUE LA INSPIRACIÓN NUNCA ES UN ESTADO NATURAL DE LA CONCIENCIA.».