La segunda parte de "La isla de las mil fuentes" sigue la misma línea que su primera parte. Sarah Lark te incita a seguir leyendo y continuar la novela para ver que sucedes con este o aquel personaje. Además podrás vivir episodios de acción y creerás estar en un barco pirata siendo Bobbie o Bonnie... al pie de un cañón. Nuevamente se vuelve a reflejar la crueldad de los vigilantes y a hacendados de las plantaciones respecto a los esclavos, y como así, nace un odio generalizado hacia los blancos. El único pero que le puedo poner es que a veces hace demasiados recordatorios de la novela anterior o de esta misma.
hace 9 meses