El creciente bienestar social de los países de Europa Occidental y en Europa del Este ha traído como consecuencia una espectacular divulgación de los avances científicos. La ciencia médica ha evolucionado muchísimo en lo relativo a maquinaria técnica de diagnóstico, hospitales mejor preparados y personal especializado. Todo ello es cierto, sin embargo estos avances se han probado insuficientes en lo que respecta a detectar precozmente enfermedades, y sobre todo la ciencia no ha logrado encontrar tratamientos exentos de efectos secundarios.Debido a esta situación, la población está mirando hacia otro lugar para poder curar sus enfermedades. Gracias a los medios de comunicación de masas podemos observar el interés que hay por la medicina natural. Cada día se inauguran nuevos consultorios de medicina natural, se abren nuevos herbolarios, centros de dietética y nuevas parafarmacias. Las personas buscan soluciones menos agresivas para sanar sus enfermedades, con terapias menos violentas. A algunas personas les da miedo tomar fármacos, no tienen plena confianza en la medicina sintética y terminan por acudir a la medicina natural.Ésta es la razón de "El médico en casa". Esta obra no pretende sustituir al médico de siempre, sino enriquecer los conocimientos del lector sobre medicina natural con la alimentación y la dietética, la fitoterapia y la homeopatía como formas terapéuticas.