Este libro es el mejor ejemplo del dicho que reza que nunca hay que juzgar un libro por su portada. A pesar del horror perpetrado por la editorial Espasa, nos encontramos con un ensayo que no solo nos habla acerca de curiosidades sobre el mundo romano sino también es un trabajo que nos hacer darnos cuenta de lo romanos que somos en el día a día ya sea por nuestros actos, nuestra forma de ser por el lugar en el que vivimos. La verdad que me dan ganas de leer más libros de este hombre tan salao. Os lo recomiendo.
hace 1 año